El Libro de Horas de la Virgen Tejedora


Mónica C. Abad.- Un libro de horas (también denominado horarium; livre d'heures [livr 'dœr]) es uno de los manuscritos iluminados más comunes de la Edad Media. Cada libro de horas es único, ya que se elaboraba en exclusiva para una persona en concreto (generalmente de la nobleza). Este tipo de documento suele contener textos de rezos, salmos, así como abundantes iluminaciones, todo ello haciendo siempre referencia a la devoción cristiana. En su forma originaria, un libro de horas estaba constituido por un  texto agrupado con las prácticas oratorias para cada hora litúrgica del día, lo que dio lugar a su nombre. Sin embargo, con el tiempo, se fue enriqueciendo con otras añadiduras útiles, como por ejemplo los calendarios (tanto seculares como religiosos). Fueron compuestos para aquellas personas de la nobleza que deseaban incorporar los elementos de la vida monástica a su vida cotidiana. 



Los textos incluidos se centran tanto en la recitación, como en el canto de un número de salmos, que puede ser ejecutado por un conjunto de rezantes. Un libro típico de horas contiene: Las Horas Marianas (denominadas también Oficios de Veneración a la Virgen María), que incluyen los quince Salmos de Grados y el Oficio de los Muertos, donde aparecen los siete salmos penitenciales y la Letanía de los Santos. La mayoría de los libros empiezan con estos contenidos básicos, y se van ampliando con otra serie de rezos y devociones. Eran leídos en diversas horas del día: la aurora (laudes), la siete de la mañana (prima), 3 de la tarde (tercia),(la víspera) anochecer,  y completa (noche).

Lo más significativo de estos manuscritos es el hecho de que la mayoría están abundantemente iluminados, por lo que forman un capítulo importante del archivo histórico de la vida de los siglos XV y XVI, así como una fuente de iconografía importante del cristianismo medieval. A finales del siglo XV se empezaron a imprimir diversos libros de horas con ilustraciones xilografiadas.

Un ejemplo claramente representativo de este tipo de ejemplares es el Libro de Horas de la Virgen Tejedora, elaborado en un manuscrito con una finísima vitela y pigmentos muy depurados, utilizando una técnica artesanal excelente que propició una decoración e ilustración exquisita. Está considerado como un ejemplo modélico del estilo francés en su momento de máxima perfección, debido a la escasez de exceso ornamental en el tratamiento de los márgenes de las hojas, la serena belleza de las miniaturas, o la elegancia en todos los pormenores. 

Además de las partes fijas de que constan estos libros, en este manuscrito se encuentran los elementos canónicos Obsecro te y O intemerata, las Horas de la Cruz, las Horas del Espíritu Santo y un muestrario representativo de sufragios, siguiendo el uso romano de las prácticas piadosas tradicionales. En cuanto al estilo, refleja un momento culminante de la técnica literaria por su perfección clásica. 

El original se conserva en la Fundación Lázaro Galdiano, del que existe un facsímil en un formato de 15,3 por 20,45 cm., realizado en papel especial en pergamino tratado y envejecido, cuyos pliegos están cosidos con hilo vegetal. Esta edición se presenta acompañada de un libro estudio de la obra, en una impresión única de 1015 ejemplares, numerados y certificados ante notario.