CÓDICES


LA BIBLIA MORALIZADA 
Y LA PEDAGOGÍA CRISTIANA

Biblia moralizada es el nombre, no de un libro concreto, sino de un género de códices característico del final de la Edad Media, en los cuales se plasman gráficamente una serie de pasajes bíblicos concretos (es decir, no reproducen la totalidad de las Sagradas Escrituras), con una intencionalidad edificante. Los autores de estos volúmenes, de los que se conservan varios ejemplares de distinta datación y autoría, no pretendían poner a disposición de sus lectores una versión fiel de la Biblia para que extrajeran sus propias conclusiones, sino que seleccionaban aquellos que mejor servían para sus propósitos pedagógicos



Es, quizás, el libro que más misterios guarda entre sus páginas. Se trata del único manuscrito de origen medieval que no ha conseguido ser descifrado hasta ahora. Escrito hace unos 600 años por un autor anónimo en un alfabeto no identificado y un idioma incomprensible, el Manuscrito Voynich se ha convertido en el Santo Grial de la criptografía histórica, aunque los detractores de esta obra defienden la teoría de que el libro no es más que una secuencia de símbolos al azar que carecen de sentido alguno. Invención o realidad, lo cierto es que el Manuscrito Voynich fascina hasta a los más escépticos.



En la trastienda de la historia, se cuecen todo tipo de intereses: desde las intrigas palaciegas hasta las más burdas maniobras de márketing turístico. Dada la relevancia que en el Medievo tenía el Camino de Santiago como columna de transmisión de la cristiandad, así como el tumultuoso estado de las lides dinásticas y papales, no es extraño que muchos de los testimonios escritos que se originaron en la época tuviesen una, cuanto menos, curiosa génesis. El Códex Calixtinus, recientemente sustraído de la Catedral de Santiago, oculta una serie de vicisitudes que conviene conocer para contextualizarlo en su época.

Entre los ejemplos más extravagantes de libros antiguos, se encuentra este fantástico códice de forma circular (de ahí su nombre: Codex Rotundus), al parecer, perteneciente al conde Adolfo de Clèves y La Mark, quien habría entrado en contacto en la corte borgoñesa con las últimas tendencias de la época en materia de iluminación de manuscritos y habría impulsado la creación de este minúsculo tomito, de poco más de 9 cm de diámetro y exquisitamente iluminado por un maestro flamenco de identidad desconocida.

Los Códices de Madrid pertenecen tal vez al período más productivo de la vida de Leonardo da Vinci, desde 1491 hasta 1505. Muchos de los ingenios ilustrados en estos manuscritos no serían desarrollados por completo hasta muchos siglos después, caso del giroscopio o el llamado "engranaje sin fin". Ahora bien, estos Códices no se limitan a una colección de diversas máquinas, sino que constituyen un análisis sistemático de los conceptos y elementos de las máquinas. Hubieron de transcurrir doscientos años antes de que los sabios franceses, por ejemplo, desarrollaran un análisis similar para establecer las bases de las teorías modernas de la mecánica.


LOS TEXTOS ASTRONÓMICOS Y EL MITO EN LAS ESTRELLAS 

El manuscrito lat. Cot. 44, conservado en la Biblioteca Estatal de Berlín, es un compendio de textos astronómicos y astrológicos clásicos, reunido e ilustrado durante la segunda mitad del siglo XIV en Francia o en Flandes por un autor desconocido experto en la ciencia, así como en su uso popular en esa era. La ausencia de referencia bibliográfica significa que es difícil de establecer la fuente exacta del manuscrito. La National Library postula que perteneció al Príncipe Federico Guillermo de Prusia y ha pervivido a lo largo de todos los hitos históricos de Alemania, comenzando por el Tratado de Paz de Bestfalia, pasando por su reunificación y finalmente alcanza su actual lugar de permanencia en Berlín en 1997.

EL LIBRO DE HORAS DE LA VIRGEN TEJEDORA

El Libro de Horas de la Virgen Tejedora está considerado como un ejemplo modélico del estilo francés en su momento de máxima perfección, debido a la escasez de exceso ornamental en el tratamiento de los márgenes de las hojas, la serena belleza de las miniaturas, o la elegancia en todos los pormenores. Además de las partes fijas de que constan estos libros, en este manuscrito se encuentran los elementos canónicos Obsecro te y O intemerata, las Horas de la Cruz, las Horas del Espíritu Santo y un muestrario representativo de sufragios, siguiendo el uso romano de las prácticas piadosas tradicionales. En cuanto al estilo, refleja un momento culminante de la técnica literaria por su perfección clásica.


 El Club del Facsimil


UN EVANGELIARIO A CABALLO DE DOS ÉPOCAS

Un Evangeliario es un libro que contiene el texto e imágenes alusivas a las fuentes bíblicas de Mateo, Marcos, Lucas y Juan. Sin embargo, este códice que perteneció a Carlos de Angulema tiene el tamaño y parte de la iconografía de los libros de horas. Este asunto es importante, porque la Inquisición prohibió cualquier fragmento de textos bíblicos a cualquiera que no perteneciera al clero. Han sobrevivido muy pocas copias de estos siglos, y esta es una de las escasas muestras de este género.


Pedanio Dioscórides Anazarbeo fue un médico, farmacólogo y botánico de la antigua Grecia, cuya obra De Materia Medica alcanzó una amplia difusión y se convirtió en el principal manual de farmacopea durante toda la Edad Media y el Renacimiento. El texto que recibe su nombre de este autor es un manuscrito que describe unas 600 plantas medicinales, incluyendo la peligrosa mandrágora, unos 90 minerales y alrededor de 30 sustancias de origen animal. A diferencia de otras obras clásicas, este libro tuvo una enorme difusión durante la Edad Media, tanto en griego como en latín o árabe.

EL APOCALIPSIS GLOSADO, CIMA DEL ARTE MEDIEVAL

El último libro de la Biblia no ha estado exento de controversias, desde los primeros siglos del Cristianismo, prueba de ello es la gran proliferación de textos que sobre él han versado. Uno de ellos es el Apocalipsis Glosado conservado en la Biblioteca Nacional de Francia, con la signatura Ms. Français, 403. La fecha de su elaboración se sitúa en torno al año 1250, y contiene el comentario insular al Apocalipsis más antiguo. Forma parte de una familia artística que reagrupa las compilaciones antiguas del Apocalipsis. En concreto, el manuscrito francés, 403 proviene de otros dos manuscritos, a saber, El Salterio de Evesham y El Apocalipsis de Trinity College. Contiene una traducción glosada del Apocalipsis muy extendida, transmitida, a su vez, por otras 23 copias independientes.

EL BEATO DE NAVARRA, SÍNTESIS DE TRADICIONES

En la Biblioteca de la Catedral de Pamplona existía en el siglo XII un códice que contenía la explicación al Apocalipsis de Beato de Liébana, según nos refiere el jesuita P. José Moret. El libro fue sustraído de su estantería a mediados del siglo XIX, pudiéndose identificar, con bastante probabilidad, con el existente en la Biblioteca Nacional de Francia, Nouv. Acq. Lat. 1366, dado que la escritura e iluminaciones prueban su origen español. Se trata de uno de los ejemplos más excelsos del género en toda la historia. Consta de 314 páginas, de las cuales 63 son miniadas. El texto se distribuye de dos columnas y 36 líneas, con letra carolina de transición gótica.



El Libro de Horas de la condesa de Bertiandos representa un curioso manuscrito iluminado si lo comparamos con el resto de los libros de horas de su época (siglo XVI). Está considerado, además, como una cima de la iluminación artística religiosa y popular de todos los tiempos. En este códice se representan costumbres y usos que lo convierten en un documento esencial para el conocimiento de tradiciones y hábitos perdidos. Con gran minuciosidad y excelente riqueza cromática se presentan flores, frutos, insectos, peces, animales de caza, animales domésticos, trompetas, barcos, escaleras, instrumentos de labranza y náuticos, musicales y formas híbridas.